Y TÚ… ¿ESTÁS EN LA LISTA?

Con esta pregunta nos ataca Carolina Herrera al presentar este perfume, 212 VIP Men, un “Eau de Toilette” para hombre de carácter Amaderado Oriental. Esta creación es la esencia de las fiestas más exclusivas de Nueva York, clubs nocturnos altamente sofisticados, deseados por muchos, y disfrutados por pocos, lugares de élite en los que se junta lo mejor de cada casa, para disfrutar de noches infinitas, de desenfreno y repletas de glamour.

Esta fragancia se lanzó al mercado en 2011 por los perfumistas Emilie Coppermann y Lucas Sieuzac, con ella, pretendían transmitir la pura esencia de un hombre deseado y amante de la noche. Un chico que se mueve por los mejores locales, y despierta el deseo de todas las mujeres, que lo idolatran y lo admiran, el rey de las fiestas, la alta realeza de la noche, un chico que equilibra a la perfección el carisma, el humor y la sensualidad, convirtiéndose así, en una estrella nocturna.

Su estela, intensa e informal, consigue destacar en un ambiente cargado de diferentes aromas y repleto de nuevas sensaciones, como es la noche. Ésta se caracteriza por su desenfado y su gran atractivo, debido a notas adictivas como el caviar o el maracuyá, con un toque de diversión gracias a la presencia de vodka y ginebra, y como no, con una fuerte presencia varonil, proveniente del cuero. Una fusión magistral que consigue recrear una esencia deseable.

¡QUE EMPIECE LA FIESTA! Esto es lo que piensa el chico 212 VIP cuando entra en un local ‘Aquí estoy yo, que inicie la diversión’ y así, es. Con solamente pisar un lugar todo el mundo se hace eco de su presencia, y la noche, da el pistoletazo de salida.

ZONA VIP. Este chico no está hecho para estar en el centro de la pista, pero sí para ser el centro de todas las miradas. Su lugar idóneo es uno de los exclusivos reservados, rodeado de su gente y alejado de las masificaciones, puesto que él, es un caballero noctívago.

MANHATTAN. El nombre de esta fragancia, proviene de la isla de Manhattan, quizás el lugar más ‘it’ de la ciudad. 212 es uno de los prefijos telefónicos de esta zona neoyorkina, cuna de nuevas tendencias y de una agitada vida nocturna.